Después de que el pasado miércoles los partidarios de Trump asaltaran el Capitolio en un intento de impedir la ratificación de la victoria electoral de Joe Biden y que dejaron como consecuencia cinco muertos, el partido Demócrata presentó ayer lunes un impeachment en la Cámara de Representantes de EEUU, acusándolo de "incitación a la insurrección".
"Por todo lo anterior, Donald Trump ha demostrado que, si se le permite continuar en el cargo, será un peligro para la seguridad nacional, la democracia, y la Constitución, y que ha actuado de una manera incompatible en extremo con la independencia del Estado y el Estado de Derecho. Donald Trump, por tanto, merece 'impeachment' y juicio [político], expulsión del cargo, e inhabilitación para el ejercicio de cualquier posición de representación, honor, confianza o remuneración de Estados Unidos", redactan en el artículo de Impeachment.
Para que el juicio político pueda tener éxito, se necesitan suficientes votos en el Senado, donde ahora mismo hay 51 republicanos y 48 demócratas, y se necesitan 67 votos. En ese caso sería difícil ya que la mayoría de los republicanos podrían oponerse.
Este proceso no empezaría sino hasta después del 20 de enero cuando Joe Biden haya sido juramentado como presidente de los Estados Unidos, y probablemente la Cámara de Representantes aplacen el envío del procedimiento al Senado durante varios meses, para no interferir con la agenda de Biden. De esta forma permitiría que los dos senadores que ganaron las elecciones en Georgia, puedan asumir sus puestos y así tener mayor cantidad de demócratas en el Senado.
Con el juicio se decidiría si Trump quedaría inhabilitado para ejercer cargos públicos federales y así no podría postularse para las elecciones del 2024.