Así se prepara la mascarilla con linaza que protege tu piel y ayuda a reducir las arrugas

El lino o la linaza es muy versátil y fácil de incorporar a tu rutina de cuidado diario. Además, es uno de los ingredientes naturales más utilizados en la industria de la belleza. Si quieres conocer más sobre los beneficios y usos de una mascarilla aquí te contamos todos los detalles.

Recuerda que aunque existen cremas en el supermercado especiales para tratar las arrugas, las mascarillas naturales tienen su propio encanto. Son efectivas y una herramienta ideal para darle un cuidado extra a tu piel.

Beneficios de la linaza para la piel
Según Healthline, la linaza ayuda a hidratar la piel de forma natural. Gracias a su contenido de ácidos grasos como el omega-3, puede mantener la piel suave y ayudar a reducir la apariencia de líneas finas y arrugas.

La linaza es rica en antioxidantes, lo que puede ayudar a proteger la piel del daño causado por los radicales libres.

Puede estimular la regeneración celular de la piel, lo que puede ayudar a mejorar su apariencia general.
Cuenta con propiedades antibacterianas ideales para pieles con acné.

Cómo hacer una mascarilla de linaza
Se recomienda aplicar la mascarilla de dos a tres veces por semana para ver resultados óptimos respecto a las arrugas o líneas de expresión. Recuerda que es importante hacer una prueba de alergia antes de aplicarla para asegurarte de que no cause ninguna reacción adversa.

Ingredientes y procedimientos para hacer la mascarilla de linaza
Mezcla 1 o 2 cucharadas de linaza con media taza de agua o leche. Usar leche hidratará tu piel al máximo. Cubre la mezcla con plástico y deja que reposen los ingredientes de 2 a 3 horas.

Verifica que la consistencia de la mascarilla sea espesa. Si la mezcla parece demasiado líquida, puedes dejarla reposar un poco más de tiempo. Algunas personas la dejan reposar toda la noche.

Puedes colar las semillas para obtener el líquido solamente. Presiona suavemente las semillas con la cuchara para extraer todo el gel. Aplica la mascarilla en tu rostro limpio, especialmente en las zonas con arrugas. Puedes aplicarla con tus dedos o con brocha. Evita el área alrededor de los ojos y la boca.

Deja reposar por 10 a 15 minutos. Mientras la mascarilla se va secando, se irá tensando su piel. Enjuaga con agua tibia y seca tu rostro dando suaves toquecitos con una toalla.

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