Rusia acusa a Ucrania de usar armas químicas durante incursión en Kursk

Redacción, Agencias.- El gobernador interino del Oblast de Kursk, en conflicto, ha acusado a Ucrania de envenenar a civiles con armas químicas durante la incursión en territorio ruso.

Durante una reunión el lunes con Vladimir Putin, Aleksey Smirnov le dijo al presidente que un grupo de trabajadores de la empresa energética Rosseti «fue atacado» por fuerzas ucranianas durante el fin de semana, informó la agencia estatal rusa RT.

Según Smirnov, mientras los trabajadores se refugiaban en una comisaría local, fueron atacados con proyectiles que «contenían armas químicas» y, junto con varios agentes de policía y el jefe del consejo del pueblo, fueron «envenenados» como resultado.

Las acusaciones hechas por Smirnov no son nuevas en el conflicto en curso, y forman parte de la guerra propagandística concurrente emprendida tanto por Moscú como por Kiev con el objetivo de dañar la reputación de su oponente.

Desde el estallido de la guerra, ambos lados se han intercambiado acusaciones de uso de armas químicas y otras violaciones del derecho internacional.

En mayo, el Departamento de Estado de EE. UU. acusó a Rusia de usar el arma química cloropicrina contra tropas ucranianas y sancionó a varias agencias e individuos rusos en respuesta.

La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, un organismo intergubernamental fundado para implementar la Convención sobre Armas Químicas de 1993, ha dicho que las acusaciones de uso de armas químicas por ambas partes hasta ahora estaban «insuficientemente fundamentadas.»

Sin embargo, añadió que la situación en Ucrania «sigue siendo volátil y extremadamente preocupante en cuanto a la posible reaparición del uso de productos químicos tóxicos como armas.»

La reunión entre Smirnov y Putin se convocó para discutir la crisis en curso en Kursk, donde las fuerzas ucranianas han continuado avanzando significativamente desde la incursión sorpresa transfronteriza del martes pasado.

Smirnov continuó diciendo que, desde el inicio de la incursión, 12 civiles han muerto en la región, y otros 121 han resultado heridos.

Según el Ministerio de Defensa de Rusia, a través de Telegram, Ucrania ha perdido hasta ahora 1,610 militares, más de 200 vehículos de combate, así como cuatro sistemas de misiles antiaéreos.

Durante la reunión del lunes, Putin también reaccionó ante la afirmación de Smirnov de que Ucrania ahora controla 28 asentamientos en Kursk, y pidió a las fuerzas armadas del país «expulsar al enemigo de nuestros territorios.»

El presidente añadió que la incursión había cerrado la puerta a cualquier posible negociación con Ucrania, diciendo: «¿Qué tipo de negociaciones podemos tener con aquellos que atacan indiscriminadamente a civiles e infraestructura civil, o que plantean amenazas a instalaciones nucleares? ¿Qué hay que discutir con tales partes?»

Ucrania y Rusia también están intercambiando culpas por el incendio que se produjo en la central nuclear de Zaporizhzhia en el sur de Ucrania el domingo.

Según la empresa estatal rusa de energía Rosatom, el incendio fue el resultado del «terrorismo nuclear» por parte de Ucrania, mientras que Zelensky dijo que el incendio fue causado por las acciones de los «ocupantes rusos.»