Roberto Ángel Salcedo promueve la conservación y difusión de la música en RD

El ministro de Cultura, Roberto Ángel Salcedo, destacó este lunes la importancia de preservar y proyectar los ritmos autóctonos de la República Dominicana, entre los cuales sobresalen el merengue, la bachata y la salsa, esta última con un fuerte impacto internacional gracias al trabajo del maestro dominicano Johnny Pacheco.

Salcedo recordó que el merengue y la bachata cuentan con la declaratoria de patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la UNESCO, lo que garantiza su reconocimiento global y resalta su esencia dominicana. Sobre la salsa, reconoció la influencia de Pacheco y la sonoridad desarrollada desde Nueva York en los años 70, aunque señaló que su origen tiene también un componente cubano.

En cuanto al dembow, el ministro aclaró que aunque se le atribuyen ajustes realizados en República Dominicana, el ritmo tiene raíces puertorriqueñas.

Por ello, enfatizó que la proyección internacional de la música dominicana debe centrarse especialmente en el merengue y la bachata, sin dejar de reconocer otras expresiones como la salsa y el perico ripiao.

 Roberto Ángel mencionó la propuesta del cantante Sergio Vargas de crear un salón permanente de música dominicana, que sirva para presentaciones de merengue, bachata, salsa y perico ripiao, destinado tanto a turistas como a la proyección cultural de los artistas locales, generando empleo y fortaleciendo la industria musical.

El componente turístico
El ministro explicó que esta iniciativa no solo tiene un componente cultural, sino también turístico, por lo que se busca articular esfuerzos entre el Ministerio de Cultura y el Ministerio de Turismo, potenciando la difusión de la música dominicana en espacios estratégicos, como la zona colonial y otros lugares de afluencia turística.

Finalmente, Roberto Ángel anunció que se trabaja en un proyecto de ley para la música dominicana, con el objetivo de garantizar estímulos institucionales a los artistas, favorecer la emisión de estos géneros en medios locales y preservar la esencia de la música típica del país, asegurando su continuidad y valorización en el tiempo.