Robbie Williams se sincera y habla de la falta de sexo en su matrimonio con Ayda Field: "Éramos insaciables"

La vida de Robbie Williams (49) siempre genera titulares. Y más si se trata de un plano afectivo-sexual, del que ha hablado el cantante recientemente en una entrevista al tabloide británico The Sun que ha concedido junto a su esposa, Ayda Field (43).

El intérprete de Angels o Love My life pasó por el altar hace ahora 13 años con la actriz estadounidense, en una íntima ceremonia en la isla de Santa Catalina, a poco más de 30 kilómetros de la costa de Los Ángeles.

Ambos se conocieron en 2006 a través de amigos comunes. "Conocí a mi esposa el mismo día que me acosté con una narcotraficante", dice Robbie Williams en la biografía Reveal: Robbie Williams. Desde entonces, en sus propias palabras, la suya fue una relación muy pasional, con mucho sexo. Algo que ahora brilla por su ausencia. "Todo el mundo sabe que no hay sexo después del matrimonio.

Esa es una gran verdad. Tomé testosterona por un tiempo para combatir la depresión, pero, debido a que soy un adicto, tuve que dejar de hacerlo. Obtuve estos enormes hombros cuadrados (...) El sexo que tuvimos cuando tomaba testosterona fue increíble; lo hacíamos todo el tiempo. Éramos insaciables. No podíamos quitarnos las manos de encima", cuenta al medio antes citado.

"Extraño eso. Fue un período divertido. Sin embargo, ahora, a veces, Ayda se gira hacia mí en el sofá y me dice: 'Deberíamos tener sexo', y yo estoy sentado, comiendo una mandarina, y simplemente me encojo de hombros. Entonces ya sabes, a veces lo intentamos", añade.

Por su parte, y preguntada expresamente por ello, Ayda hace hincapié en la intimidad. Un término que, en sus propias palabras, puede ser fácilmente confundible. "Creo que la gente confunde sexo con intimidad. Siempre nos abrazamos y besamos, nos tomamos de la mano y nos tocamos cuando estamos viendo la televisión en el sofá, o una película, o lo que sea. La intimidad es un elemento importante y significativo del amor. Rob y yo estamos en la misma página. Estamos felices", expresa.

Ya el año pasado, la actriz dio indicios de la escasez de relaciones sexuales en su matrimonio. "En realidad no recuerdo la última vez que me acosté con Rob a la misma hora. Cuando había romance, cuando eso sucedía, sí, había un lugar para dormir solo por necesidad física. Pero ahora eso está completamente muerto, ha sido borrado por cuatro niños. Realmente no hay necesidad de ir a la cama a la misma hora. Es solo un espacio de trabajo conjunto ahora", dijo.