Jessica Judith, una dominicana que vive “el sueño americano” y la viralidad en TikTok

Jessica Judith Ortiz nunca pensó que un video viral la encaminaría a cumplir muchos de sus sueños. Viajar, conocer a grandes artistas, colaborar con grandes marcas y mostrar su vida es lo que se ve en sus redes sociales, así como lo orgullosa que se siente de ser dominicana.

Como muchos jóvenes criollos, Jessica emigró a Estados Unidos en plena adolescencia. En 2016, cuando tenía 14 años de edad, sus padres decidieron mudarse a Florida, lo que para ella fue un cambio muy abrupto. Dejar atrás su vida, colegio y amigos le chocó bastante. Le tomó un tiempo asimilar su nueva realidad, aunque tenía dominio del idioma inglés.

“Yo entiendo muchísimo a cualquier persona que se mude de su país a esa edad, fue muy difícil…, pero el colegio para mí fue el shock más grande”, afirma la influencer.

Destaca que fue un sobresalto llegar a una escuela estadounidense donde la población estudiantil es inmensa, a comparación de los colegios en los que estuvo en Santo Domingo. No obstante, su vida realmente cambió al llegar a las redes sociales.

EL MUNDO DE LAS REDES
Su primer video junto a Benny, su mejor amigo de ese entonces (hoy su novio), se viralizó en Tiktok, después de ahí su crecimiento ha sido exponencial.

Su contenido es reflejo de su personalidad, su estilo de vida y sus gustos. Le encanta mostrar su diario vivir y conectar con los cibernautas. Actualmente, cuenta con más de 3 millones de seguidores en TikTok, 628 mil seguidores en Instagram y 134 mil suscriptores en YouTube, plataforma en la que hasta el momento tiene 75 filmaciones, desde enero de 2021.

Con videos que pasan los cuatro millones de vistas en TikTok, la dominicana ha logrado llegar a personas de diferentes países gozando con gran cariño en las plataformas, lo que le ha permitido colaborar con grandes marcas. 

Cuenta que la creación de contenido demanda mucho tiempo y creatividad, lo que en algunas ocasiones son retos. Para mantenerse activa en redes trata de ser constante subiendo mínimo un video diariamente en TikTok e Instagram, mientras que en YouTube trata de subir uno a la semana.

No obstante, admite que hay muchas cosas de su vida que prefiere dejarla en privado, porque al exponer gran parte de sus días en redes, muchas personas se sienten en la potestad de opinar y crearse juicios sobre lo que ven.

Además, prioriza la calidad por la cantidad al momento de compartir sus creaciones en las diferentes plataformas. 

“Esto es lo menos que yo hubiese pensado, siempre me han encantado las redes, pero yo nunca pensaba que yo sería como que una parte así de las redes”, confiesa la youtuber.