Miles de aves marinas murieron en Alaska en el mayor deceso de vertebrados en la historia
Trágicas 16/12/2024Prensa TNI 51Investigadores estadounidenses encontraron evidencia que confirma que alrededor de la mitad de la población de araos comunes de Alaska murió como resultado de los efectos causados por una ola de calor marina extrema, informó este jueves la Universidad de Washington.
Una ola de calor marina llamada 'the blob' se estacionó en el noreste del océano Pacífico desde finales de 2014 hasta 2016, lo que provocó que la temperatura del agua se incrementara por encima de lo normal. Las consecuencias de este fenómeno se vieron reflejadas en la reducción de las poblaciones de fitoplancton, así como en la muerte de diversos depredadores superiores.
En un estudio publicado en 2020 se reportó por primera vez la muerte masiva de araos comunes ('Uria aalge'), una especie de ave marina que vive mar adentro durante su período no reproductivo. Según los autores de la investigación, se contabilizaron 62.000 cadáveres de araos comunes entre 2015 y 2016, y creen que la causa de su fallecimiento fue la inanición.
En un intento por conocer sobre el impacto total de la ola de calor en la población de araos, los científicos analizaron los datos recopilados entre 2008 y 2022 en 13 colonias de estas aves ubicadas a lo largo del golfo de Alaska y del mar de Bering oriental.
Un resultado desolador
Se descubrió que el número de araos en el golfo de Alaska se redujo de 8 a 4 millones de especímenes a consecuencia de la ola de calor. En las colonias del mar de Bering oriental, se registró una pérdida del 75 % de la población de estas aves marinas. Estos nuevos hallazgos fueron documentados en un artículo publicado en la revista Science.
Los investigadores describieron este suceso como la mayor muerte de vida silvestre, específicamente de vertebrados no peces, que se ha reportado en la era moderna. Por su parte, la bióloga Heather Renner explicó que el evento recientemente descubierto fue de un orden de magnitud superior a lo que ocurrido en 1989, cuando un derrame de petróleo de la empresa Exxon Valdez en Alaska provocó la muerte de cientos de miles de araos.
Una revelación alarmante
A pesar de ser una especie típicamente resistente, los científicos no han observado signos de recuperación en la población de araos de Alaska, lo que ha generado preocupación. Esto se debe a que ha pasado un tiempo considerable desde que tuvo lugar 'the blob'.
"Si las condiciones de alimentación son buenas, creo que hay esperanza", sostuvo Renner. No obstante, recalcó que existe "temor" entre los científicos, puesto que se "prevé que eventos como este se vuelvan mucho más comunes", además de que no se ha observado "ningún signo de recuperación, ocho años después" del suceso.
rt