Nash, el bebé más prematuro del mundo, celebra su primer año de vida y desafía la medicina neonatal

Ankeny, Iowa, EE.UU. — Nash Keen, conocido con ternura como “Nash Potato”, celebró su primer cumpleaños este mes, marcando un hito histórico en la medicina. Nacido el 5 de julio de 2024 con solo 21 semanas exactas de gestación —133 días antes del término—, ha sido reconocido por Guinness World Records como el bebé más prematuro en sobrevivir.

 Su nacimiento ocurrió en el Centro de Salud de la Universidad de Iowa, donde el pequeño pesó apenas 285 gramos y midió 24 centímetros. El equipo médico lo trasladó de inmediato a la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN) de nivel IV, enfrentando uno de los mayores desafíos clínicos que haya visto la institución.

“Cuidar a un bebé nacido a las 21 semanas es completamente distinto”, explicó la neonatóloga Amy Stanford, quien destacó el esfuerzo multidisciplinario que permitió que Nash progresara. Pese a las condiciones críticas iniciales, Nash demostró una fortaleza sorprendente desde sus primeros días de vida.

Su madre, Mollie Keen, compartió con Guinness que celebrar este primer año fue mucho más que una fiesta: fue la confirmación de una lucha llena de incertidumbre, amor y esperanza. La familia festejó en Ankeny, Iowa, con regalos, pastel autorizado por sus médicos y la presencia de amigos y seres queridos. Uno de los momentos más emotivos fue cuando Mollie pudo cargar a su hijo por primera vez, un mes después de su nacimiento. Aquel contacto piel con piel marcó el inicio de una esperanza real para su recuperación.

Tras casi seis meses en cuidados intensivos, Nash fue dado de alta en enero de 2025. Hoy continúa su desarrollo bajo seguimiento médico, con asistencia de oxígeno, alimentación por tubo y audífonos, además de terapia especializada. El récord de Nash supera por un día al de Curtis Zy-Keith Means, quien nació en 2020 con 132 días de prematuridad. También supera a Richard Scott William Hutchinson, nacido 131 días antes de término ese mismo año. Con este logro, Nash se convierte en símbolo de resiliencia y avance médico, y su historia inspira a familias, profesionales de la salud y al mundo entero.