Manchas de sol en la cara: el mejor momento para eliminarlas con estos tratamientos
Moda y Belleza19/11/2024Yerandi SantanaLas manchas solares son una de las principales preocupaciones estéticas de las mujeres, incluso por encima de las arrugas. Aunque con el paso de los años, el problema es más evidente, las manchas afectan también a mujeres jóvenes, sobre todo después del verano. Su origen es multifactorial, pero la genética, las hormonas y la exposición al sol sin la protección adecuada son las causas más importantes de la aparición de las hiperpigmentaciones. Como explica la doctora Carmen Martín, especialista en medicina estética, «los rayos ultravioleta del sol estimulan la producción de melanina, el pigmento que da color a nuestra piel. Cuando hay un exceso de melanina en una zona concreta, aparece la mancha. El envejecimiento también influye. Con la edad, nuestra piel pierde elasticidad y se vuelve más susceptible a las manchas. Los cambios hormonales, como los que ocurren durante el embarazo o al tomar ciertos medicamentos, también pueden favorecer su aparición".
Las manchas que salen después del verano
Aunque hay otros tipos de manchas, las que salen después del verano son dos: los lentigos solares y el melasma. «Las manchas que salen por el sol, lentigos solares, son pequeñas hiperpigmentaciones marrones que varían en cuanto a tono y tamaño. También son simétricas y uniformes y muchas veces se pueden confundir con lunares. Pueden aparecer en cualquier zona fotoexpuesta, lo más común es en cara y manos y en cabezas de personas con calvicie, pero también se ven en cuello, brazos y piernas», comenta la doctora Flavia Bonina, médico estética.
Por su parte, el melasma también se activa después del verano, por una exposición solar sin protección adecuada, aunque este tipo de mancha tiene un componente hormonal muy alto. De hecho es más habitual en mujeres embarazadas, o entre las que toman anticonceptivos. El melasma tiene un tono más oscuro que los lentigos, una forma difusa y habitualmente sale en la frente, las mejillas, el mentón y el labio superior, lo que se conoce como la 'mancha del bigote'.