Arzobispo de Santiago celebra misa en solidaridad con víctimas del Jet Set

Personalidades de Santiago se congregaron en la Catedral Santiago Apóstol para realizar una misa a las víctimas del trágico desplome del techo de la discoteca Jet Set, ocurrido la madrugada del pasado martes, que cobró la vida de unas 235 personas. La ceremonia, oficiada por Monseñor Héctor Rafael Rodríguez, arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago, tuvo como propósito principal mostrar solidaridad con los afectados y no señalar culpables, como él mismo precisó durante su homilía.

“Vine a esta misa no para encontrar culpables, pues esa es la tarea del Ministerio Público, sino para unirnos en el dolor que ha causado esta tragedia”, indicó Rodríguez. El arzobispo comparó la pérdida sufrida en la discoteca con “la tragedia que el mundo celebra el próximo Viernes Santo, del Cristo sufriente y de un justo condenado y muerto injustamente”.

Rodríguez también instó a las autoridades competentes a investigar a fondo el incidente y proporcionar a la sociedad respuestas claras sobre las causas de esta tragedia.  “Es fundamental que se informe a la población sobre lo ocurrido, para que no sea un caso más que se olvide como si ‘muriera un pollo por ahí’”, enfatizó.

 En su oración, Monseñor Rodríguez suplicó por la paz eterna de los fallecidos, afirmando que la Iglesia y la sociedad de Santiago están con los familiares de las víctimas. “Nos duele lo que ustedes están viviendo. Lloramos con ustedes, caminaremos a su lado. "La Pascua que celebramos en estos días no borra el dolor, pero le da sentido”, expresó conmovido.

Las principales autoridades de la provincia coordinaron la misa. Asistieron la gobernadora de Santiago, el presidente del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Andrés Cueto Rosario, el director regional de Obras Públicas, Alexis Sosa, y representantes de diversas instituciones gubernamentales.

El acto religioso reflejó el deseo de los santiagueros por unir fuerzas en la adversidad, recordando que en cada tragedia hay seres humanos que merecen respeto y solidaridad.