
Agencia Espacial Europea presentará relojes atómicos en órbita para probar teoría de relatividad
Ciencia y Tecnología20/04/2025

AFP. – La Agencia Espacial Europea (ESA) exhibirá el lunes un conjunto de relojes atómicos hacia la Estación Espacial Internacional (EEI) para medir el tiempo con gran precisión y poner a prueba la teoría de la relatividad, un resultado de más de 30 años de trabajo.
Gracias a esta misión, los científicos podrán “medir el efecto que tiene la altitud en el paso del tiempo”, explicó Didier Massonnet a AFP, jefe del proyecto PHARAO en el Centro de Nacional de Estudios Espaciales francés (CNES). Subrayó que el objetivo de este proyecto es mejorar la medida de este “desfase gravitacional” de dos decimales, para alcanzar una precisión de “una millonésima”.
Desde 1915 y la teoría de la relatividad general de Albert Einstein, se sabe que el tiempo no es el mismo en todas partes: se ralentiza cerca de un objeto masivo, hasta el punto de detenerse al borde de un agujero negro. En la Tierra, el tiempo pasa más rápido en lo alto de la Torre Eiffel que abajo, pero este “efecto Einstein” es infinitesimal. En cambio, se vuelve perceptible a medida que uno se aleja en el espacio.
Los sistemas de posicionamiento por satélite, como GPS o Galileo, deben tomarlo en cuenta para dar una posición exacta. Sus relojes atómicos, en órbita a 20.000 kilómetros de altitud, van 40 microsegundos más rápido cada día que los que están en la Tierra.
El conjunto ACES, compuesto de dos relojes atómicos, se lanzará el lunes en un cohete Falcon 9 de SpaceX desde Cabo Cañaveral, en Estados Unidos, con destino a la EEI, a 400 km de altitud. El primer reloj, PHARAO, será el principal. Dentro de un tubo de alto vacío, se enfriarán átomos de cesio mediante láser a una temperatura cercana a cero absoluto (-273 ºC). Inmovilizados por el frío y en situación de ingravidez, sus vibraciones a una frecuencia particular se contarán con una precisión aún mayor que en la Tierra.
Los sistemas de posicionamiento por satélite, como GPS o Galileo, deben tomarlo en cuenta para dar una posición exacta. Sus relojes atómicos, en órbita a 20.000 kilómetros de altitud, van 40 microsegundos más rápido cada día que los que están en la Tierra.