

¿Te has preguntado por qué se hinchan los tobillos al final del día? Esa sensación incómoda no siempre es inocente: puede ser una señal de que algo no va bien en tu cuerpo.
Según información médica validada por instituciones como la Cleveland Clinic y la Harvard Medical School, la hinchazón en los tobillos —también llamada edema periférico— puede deberse a múltiples causas, desde una mala circulación hasta enfermedades cardíacas. Identificar el origen es clave para prevenir complicaciones y aliviar el malestar.
¿Qué es el edema y por qué afecta tanto a los tobillos?
La hinchazón en los tobillos se debe, en la mayoría de los casos, a una acumulación anormal de líquido en los tejidos blandos. Este fenómeno se conoce como edema, y puede ser temporal o un síntoma crónico asociado a otros trastornos.
Los tobillos y pies son zonas particularmente sensibles porque la gravedad favorece la acumulación de líquidos en las extremidades inferiores, especialmente si pasamos mucho tiempo de pie o sentados. La circulación se ralentiza y el sistema linfático no drena de forma eficiente.
La hinchazón en los tobillos no siempre es peligrosa, pero cuando se vuelve recurrente o dolorosa, puede ser el reflejo de un problema mayor”, advierte el equipo de Harvard Health Publishing.
Causas más comunes por las que se hinchan los tobillos
1. Sedentarismo o estar mucho tiempo de pie
Una de las razones más comunes del edema leve en tobillos es la falta de movimiento. Permanecer sentado por muchas horas —por ejemplo, en un vuelo largo o en trabajos de oficina— puede impedir el retorno venoso.
2. Retención de líquidos
Cambios hormonales, exceso de sal, deshidratación o enfermedades renales pueden causar retención de sodio y agua, lo que se traduce en hinchazón visible, especialmente al final del día.
3. Problemas circulatorios
La insuficiencia venosa crónica, una afección donde las válvulas de las venas no funcionan bien, hace que la sangre se acumule en las piernas. Esto genera inflamación progresiva.
4. Enfermedades cardíacas o renales
Tanto el fallo cardíaco congestivo como las enfermedades renales avanzadas pueden provocar hinchazón bilateral en los tobillos, acompañada de otros síntomas como fatiga, disnea o aumento de peso.
5. Efectos secundarios de medicamentos
Algunos medicamentos —como los antihipertensivos, corticosteroides, antidepresivos y hormonas— pueden provocar edema como efecto adverso. Siempre revisa tu prescripción médica.
¿Cuándo preocuparse por la hinchazón de tobillos?
No todas las hinchazones son alarmantes, pero hay signos de alerta que indican la necesidad de atención médica inmediata:
Hinchazón repentina y dolorosa en un solo tobillo
Cambios en el color de la piel (rojo o morado)
Fiebre o calor en la zona hinchada
Dificultad para respirar
Aumento rápido de peso sin explicación
Estas señales pueden indicar trombosis venosa profunda, infección o fallo orgánico, condiciones que requieren intervención médica urgente.
Cómo evitar que se hinchen los tobillos: medidas efectivas
Afortunadamente, hay varias estrategias prácticas —respaldadas por evidencia científica— para prevenir y tratar la hinchazón leve o moderada.
1. Elevar los pies al final del día
Coloca las piernas sobre una almohada por encima del nivel del corazón durante 15-20 minutos. Esto facilita el retorno venoso y linfático.
2. Hidratación adecuada
Beber suficiente agua ayuda a regular el equilibrio de líquidos y a evitar la retención causada por el exceso de sodio.
3. Reducir el consumo de sal
Una dieta alta en sodio favorece la retención de agua. Limita el consumo de alimentos procesados, embutidos, snacks y conservas.
4. Moverse con frecuencia
Levántate y camina cada hora si trabajas sentado o haces viajes largos. Rotar los tobillos, estirar las piernas o hacer ejercicios de bombeo también ayuda.
5. Usar medias de compresión
Estas prendas aplican una presión gradual desde el tobillo hacia arriba, mejorando la circulación y reduciendo la hinchazón. Son especialmente útiles para personas con varices o insuficiencia venosa.
¿Qué remedios caseros pueden ayudar?
Algunos enfoques naturales pueden complementar el tratamiento médico:
Baños de pies con sal de Epsom: alivian la inflamación muscular y reducen la tensión acumulada
Masajes linfáticos suaves: favorecen el drenaje de líquidos
Aplicar compresas frías: reduce la inflamación localizada
Estos métodos deben usarse con precaución y nunca sustituir el diagnóstico médico profesional.
¿El tipo de calzado influye en la hinchazón?
Definitivamente sí. El uso de calzado inadecuado —demasiado ajustado, con tacones altos o sin soporte— puede dificultar la circulación y aumentar la presión en los tobillos y pies.
Opta por zapatos ergonómicos, con buena sujeción y suela acolchada. Evita permanecer con el mismo par muchas horas seguidas si estás de pie.
¿Cuándo consultar al médico por tobillos hinchados?
Siempre que la hinchazón:
No desaparezca tras el descanso
Se acompañe de dolor, calor o enrojecimiento
Sea unilateral (un solo tobillo)
Se presente con otros síntomas sistémicos
Un médico puede solicitar análisis de sangre, ecografías o estudios cardíacos y renales para determinar la causa. No ignores los síntomas persistentes.
Salud180




Protesta durante visita del vicepresidente JD Vance al Disneyland Resort

SeNaSa anuncia apertura gradual del servicio de envió a domicilio de medicamento

![Imagen de WhatsApp 2025-07-11 a las 13.22.50_3d0bc377[6652]](/download/multimedia.normal.bad90338817aac87.bm9ybWFsLndlYnA%3D.webp)


