Channing Tatum generó preocupación con su drástica pérdida de peso para “Roofman

La transformación física extrema de Channing Tatum para interpretar a Roofman encendió las alarmas entre el equipo de rodaje y generó inquietud en la industria de Hollywood.

 
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El actor estadounidense perdió más de 32 kilogramos para encarnar a Jeffrey Manchester, un delincuente real que vivió oculto dentro de las paredes de una tienda Toys ‘R’ Us tras su fuga de prisión.

 
El propio Tatum, de 45 años, relató a Variety que la decisión de adelgazar de forma tan drástica se debió al perfil del personaje.

 
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“Roofman —basado en la historia de Jeffrey Manchester— es una persona muy delgada, no tan corpulenta como yo”, explicó.

 
Según el intérprete, llegó a pesar unos 109 kilogramos durante el rodaje de su anterior película, el thriller Josephine, y su objetivo era alcanzar los 84 kilogramos para el nuevo papel.

 
El estadounidense confesó que bajar de peso más allá de lo previsto le provocó vacíos emocionales, una experiencia que marcó su proceso actoral (Instagram/@channingtatum)
Sin embargo, su peso descendió hasta 78 kilogramos, mucho más de lo que había planeado en un inicio.

“El asistente de dirección, Mary Ellis, se preocupó. Me dijo: ‘Eso es suficiente, hay que darle un filete ahora mismo’”, recordó.

El director de la película, Derek Cianfrance, confirmó esa inquietud a Variety: “Jeff tenía que moverse dentro de espacios reducidos, vivir dentro de las paredes de una tienda, y eso resulta complicado si tienes una complexión mayor”.

Por esa razón, Channing Tatum consideró que debía modificar radicalmente su físico para ajustarse a la historia real del fugitivo.

El proceso fue más allá de lo físico. “Todo este vacío y tristeza del personaje también tuvieron un reflejo en mí. Me miraba al espejo y me veía desmoronando. La película fue un constante contacto con la soledad”, declaró el artista en la mencionada entrevista.

  Durante el rodaje, Tatum siguió una estricta dieta y entrenamiento, llegando a 78 kilos, peso que generó preocupación en la producción (Instagram/@channingtatum)

En distintas conversaciones con el medio, remarcó el impacto mental de ese cambio: “Sentir ese vacío es algo que termina agotando”, mencionó entre risas, aunque reconoció que fue una experiencia difícil de sobrellevar en lo personal.

Cianfrance respaldó la idea de que el actor tomara las medidas físicas necesarias para el rol: “Le dije, haz lo que consideres necesario”.

El rodaje exigió múltiples restricciones alimentarias y entrenamientos, a punto tal que, tras finalizar la filmación, Tatum publicó en Instagram que no volvería a someterse a cambios extremos para futuros proyectos.

“No haré más papeles que requieran subir o bajar tanto de peso. Es demasiado duro para el cuerpo y después resulta difícil recuperarse”, manifestó.

  El director Derek Cianfrance destacó que la delgadez de Channing Tatum era necesaria para representar la vida escondida del personaje en una tienda Toys 'R' Us (Captura de video)
Channing Tatum habló sobre el divorcio con Jenna Dewan
En paralelo al estreno de Roofman, Channing Tatum abordó en declaraciones recogidas por Variety el complejo proceso de su separación de Jenna Dewan, con quien se casó en 2009 tras conocerse en el set de Step Up.

La pareja anunció su ruptura en 2018, y aunque la declaración de soltería se formalizó un año después, la negociación sobre aspectos financieros y la custodia de su hija se prolongó hasta septiembre de 2024.

Tatum describió la etapa del divorcio como una de las más difíciles de su vida y, por primera vez, compartió cómo esa experiencia personal influyó en la interpretación de su nuevo papel.

“Entiendo perfectamente lo que significa la distancia con un ser querido. Jenna y yo estamos bien ahora, pero en su momento dolió ver cómo todo se caía a pedazos siendo tan jóvenes. Tratamos de sostener la relación durante un año y medio, aunque ambos sabíamos que el proyecto familiar se había quebrado”, relató al medio estadounidense.

 La batalla legal entre Tatum y Dewan incluyó desacuerdos sobre la franquicia “Magic Mike”, cuyos ingresos se discutieron a lo largo del divorcio (EFE/EPA/MIKE NELSON)
El mayor desafío, según indicó, fue la custodia compartida de su hija de 12 años. “Es muy difícil no convivir con tu hija a diario. Me gustaría tenerla siempre conmigo”, confesó.

Tras la separación, ambos pactaron compartir responsabilidades parentales y, desde entonces, la relación se ha estabilizado.

La disputa legal cobró relevancia pública especialmente por los intereses económicos vinculados con la franquicia Magic Mike, inspirada en la experiencia como bailarín de Tatum en Florida.

Tanto el actor como el director Steven Soderbergh invirtieron cerca de siete millones de dólares en la primera película, que recaudó 167 millones en taquilla y generó secuelas, un espectáculo en Las Vegas y un reality en HBO.

Los representantes legales de Dewan reclamaron que el valor generado por la franquicia durante su matrimonio le correspondía en parte, calculando que el negocio podía llegar a valer hasta mil millones de dólares.

La estrella reconoció que lo más difícil de la separación fue la custodia compartida de su hija, con quien mantiene un fuerte vínculo emocional (Instagram/Channing Tatum)
En la documentación judicial recopilada, Tatum negó haber bloqueado la participación económica de su expareja: “Nunca le he negado su parte de los ingresos o bienes de la comunidad. Sus acusaciones de conspirar con terceros son completamente falsas”.

Desde 2020, ambos cuentan con un acuerdo de custodia compartida y Dewan mantiene una relación estable con el actor Steve Kazee, con quien ya tiene dos hijos.