Cinco beneficios que no conocía del ñame: ayuda a bajar de peso y es fuente energía

El ñame es un tubérculo que pertenece a la familia de las Dioscoreaceae, lleno de nutrientes que contribuye a la salud, muy versátil a la hora de preparar y se puede emplear como una alternativa a las papas.      

Este delicioso tubérculo tiene un sabor y textura únicos y es una fuente de carbohidratos.

Un estudio indica que el consumo del ñame juega un importante en la prevención y el tratamiento de enfermedades metabólicas, como la obesidad, la dislipidemia, la diabetes y la enfermedad del hígado graso no alcohólico.

El ñame o Dioscorea, como se le llama a nivel científico, es puede ser empleado como “tratamiento de enfermedades inflamatorias y metabólicas, y destaca los mecanismos moleculares subyacentes”.

El ñame es una fuente prometedora “de componentes bioactivos y tiene el potencial de desarrollar nuevos compuestos bioactivos naturales para la prevención y el tratamiento de enfermedades inflamatorias y metabólicas”, destaca el estudio.

Beneficios del consumo de ñame para la salud
 
Ayuda a perder peso: por ser fuente de fibra soluble, un tipo de fibra que forma una especie de gel en el estómago, lo que genera un incremento del tiempo para digerir los alimentos, generando sensación de saciedad y disminuyendo el hambre durante el día.

Mejora las funciones digestivas: por contener gran cantidad de fibra mejora las funciones digestivas, y favorece el tránsito intestinal previniendo el estreñimiento.

Es bueno para el corazón: por ser bajo en grasas y alto en potasio ñame contribuye a la salud cardiovascular.

Fuente de vitaminas y nutrientes: el ñame es fuente de fibra, vitaminas como la C y B6, y minerales como potasio y manganeso, y es un carbohidrato complejo.

Ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre debido a la fibra y los carbohidratos complejos del ñame contribuyen a regular los niveles de azúcar en sangre.

Los pacientes con diabetes tipo 2 suelen presentar altos niveles de azúcar en la sangre.

El ñame se puede consumir como desayuno, almuerzo o cena. Como guarnición combina con otros alimentos, además se puede agregar a preparaciones como panes, sopas, postres y purés; o solo cocido con sal.