Enrique Iglesias y Anna Kournikova: familia continúa creciendo alejada de los reflectores

El anuncio del embarazo de la extenista rusa, Anna Kournikova, esposa del cantante Enrique Iglesias, ha causado impacto en el mundo del espectáculo, siendo este el cuarto hijo de la pareja que lleva más de dos décadas juntos y cuya familia ha crecido lejos de los reflectores. La familia Iglesias Kournikova reside en una mansión en Miami, protegida por un muro de casi cinco metros de altura, rodeada de guardaespaldas y con monitoreo contante de ciberseguridad.

Desde que Kournikova se lesiono la espalda a los 21 años, razón por la que tuvo que renunciar al deporte, ha evitado las apariciones públicas, pese a que en enero fue fotografiada en silla de ruedas durante una salida familiar en Bal Harbour, Miami. El contraste entre su vida actual y su pasado mediático es notable; durante su adolescencia y juventud fue una de las deportistas más fotografiadas y objeto de atención tanto por su talento como por su imagen.

La presión mediática alcanzó altos niveles, con campañas publicitarias como la de un sujetador deportivo que llevaba el lema “Solo la pelota debe rebotar”, y su elección como la “Mujer más sexy del mundo” por la revista FHM en 2002. Incluso su nombre inspiró un virus informático que se propagó globalmente en 2001, y fue mencionado en la serie “Friends”. Aunque su estado civil sigue siendo motivo de especulación, Iglesias declaró en una ocasión: “No nos hemos casado en público, pero eso no significa que no estemos casados”.

A diferencia de otros deportistas o celebridades, Kournikova ha limitado por completo la exposición de su círculo familiar. Tanto ella como Enrique Iglesias evitan difundir imágenes o comentarios sobre sus hijos en redes sociales y prefieren mantener el hermetismo, incluso respecto a su estatus marital desde que comenzaron su relación en 2001.